Mágico atardecer en el templo Uluwatu

Despedida de Bali viendo atardecer en Templo Uluwatu

Jueves 21 Julio 2016 – Atardecer en Templo Uluwatu

Comenzaba nuestro último día en Bali, hoy seguíamos nuestra ruta por las playas del sur y finalizaríamos viendo atardecer en el Templo Uluwatu.

De nuevo nos levantamos en nuestro paraíso particular, escuchando de fondo las olas del mar rompiendo contra las rocas.

Andrés se suele levantar siempre el primero, no tiene nada que hacer y se aburre, por lo que siempre se pone a hacer gestiones.

Una gestión que me encanta que haga, es la de bajar a desayunar y después traerme mi desayuno a la cama.

Día 13. Playa Dreamland, Karma Beach, Suluban y atardecer en Templo Uluwatu

Me trajo mi zumo natural, mi pancake de banana y me lo comí tumbada en la cama.

Estaba yo muy contenta en la cama con mi zumo natural de frutas cuando decidí hacer un video para mandárselo a mi madre.

Cogí el zumo y el móvil con la otra mano y salí al balcón para que se vieran las vistas, yo toda feliz hablándole al móvil.

De repente salgo al balcón, alzo la vista y me veo cinco monos en nuestra terraza, saltando y cogiendo la ropa y las toallas.

No sé cómo lo hice, pero con las dos manos ocupadas, una con el zumo y otra con el móvil, logré cerrar los ventanales y evitar que los monos se colaran.

Vi mi vida pasar en unos segundos, me imaginé dentro de la habitación luchando con los monos para que no se llevaran todo… 😉

Andrés vino corriendo del grito que pegué, me temblaban las piernas.

Desde dentro de la habitación los estuvimos observándolos un buen rato como cogían las toallas y todo lo que veían en el balcón.

Moraleja:

Cuando veáis un cartel en el baño advirtiendo que no dejéis nada en el balcón por los monos, no os lo toméis como una leyenda urbana y hacedle caso 😉

Después de un buen rato se fueron y conseguimos salir de nuevo al balcón a rescatar nuestra pertenencias.

Ese día queríamos ver atardecer en Templo Uluwatu, habitado por monos salvajes muy traviesos.

Después de esta experiencia, no me hacía ninguna gracia tener que enfrentarme con los monos del Templo Uluwatu.

Desde este día le tengo pánico a los monos salvajes 😉

Cambio de hotel – Bale Bingin

Como ya os conté en el post anterior en Uluwatu, decidimos quedarnos un día más pero en The InnPossible no quedaban habitaciones, por lo que nos trasladamos a Bale Bingin.

Nos ayudaron con las mochilas y las dejamos en recepción porque era temprano y aún no estaba lista la habitación.

Cogimos la moto y nos fuimos a recorrer más playas con muchas ganas de acabar el día en el mágico Templo Uluwatu.

Anécdota

En el día de ayer os conté que al salir del hotel habíamos visto a un viejete montando una especie de barrera y no entendíamos muy bien que hacía.

Pues hoy entenderíamos el por qué.

La barrera estaba bajada en la curva y no podías pasar con la moto.

Dos viejecillos estaban sentados en la puerta de su casa que hacía esquina con la barrera, construida por ellos, y se habían preparado unos papeles impresos donde indicaba el precio que debías pagar por pasar por esa curva.

Era totalmente alucinante e increíble pensar que por pasar por una carretera secundaria tenías que pagar porque se les había ocurrido a estos dos señores.

Y ahí estaban plantados los dos viejetes sin dejar pasar a nadie 😉

Es como se yo me bajo a la esquina de mi casa, construyo una barrera, imprimo unos papeles y me pongo a pedir peaje.

De verdad que lo recuerdo y me meo de la risa.

Coincidió que íbamos varias motos y levantamos la barrera para pasar.

Continuamos con nuestro camino aún flipando con la imagen totalmente surrealista de estos dos abueletes…

Cada vez que lo recuerdo me muero de la risa…

Playa Dreamland

Parking 5000 rupias (0,35 Euros)

El primer punto del día era la playa Dreamland Beach.

Pusimos el Maps.me en el móvil y nos fuimos hacia allí.

El día estaba un poco raro, a veces salía el sol y a veces las nubes.

Paramos en otra «gasolinera» a repostar y llegamos a Dreamland donde pagamos 5000 rupias (0,35 Euros) por el parking.

Estuvimos un rato en la playa pero entre que no había sol y estaba llena de chinos gritando, nos subimos al chiringuito a comer algo.

Karma Kandara

Parking 5000 rupias (0,35 Euros)

El siguiente punto era la playa Karma Beach, una playa secreta en el sur de Bali.

Nos la había recomendado mi amiga Macarena.

Leímos en internet que las escaleras para bajar eran interminables y se podía bajar en teleférico pagando en el hotel Karma Kandara.

Como el día anterior ya nos habíamos pegado el homenaje en El Kabron, decidimos bajar por las escaleras.

Las vistas de la playa desde arriba son espectaculares.

Dejamos la moto en el parking por 5000 rupias (0,35 Euros) y nos dirigimos a bajar las escaleras.

Efectivamente, eran interminables pero lo peor sería a la vuelta.

Andrés me repetía «Hija mía a menudos sitios me llevas»

Dale las gracias a Macarena amor 😉

Llegamos a la playa y cruzando unas rocas, por fin pisamos playa, donde podemos ver el chiringuito del hotel.

Plantamos las toallas y a tomar el sol y bañarnos un rato.

La verdad que esta playa nos gustó mucho y el entorno es muy salvaje.

En las fotos se desmerece mucho porque como de vez en cuando habían nubes no se ve tan bien.

Después de estar un rato relajados, llegaron unos trabajadores del hotel a informarnos de la oferta que tenían para comer en su terraza y la posibilidad de usar el teleférico para subir.

El precio de la oferta era de 25$.

Pero como el día anterior habíamos gastado más dinero de lo normal en El Kabron, decidimos nos gastar más.

Seguimos en las toallas, hasta que vino otro empleado a explicarnos la oferta y volvimos a decirle que no.

Así varias veces con varios empleados y siempre les decíamos que no.

Empezamos a entender que a lo mejor la playa era privada del hotel pero tampoco lo sabíamos seguro.

Seguimos tomando el sol, mientras los empleados colocaban los pufs de la terraza en la arena justo donde estábamos nosotros.

Hasta el punto en el que estábamos rodeados de pufs, todos los pufs colocados y nosotros en medio con las toallas.

Decidimos que era la hora de marcharnos, no nos habían echado ni hablado mal, todo lo contrario.

Pero claro igual la playa era privada, no íbamos a coger la oferta del restaurante y como ya habíamos estado un rato tomando el sol decidimos volver al parking.

Pensándolo después la oferta no estaba nada mal.

Es un precio asequible y pasar el día en esa playa secreta, comiendo en el restaurante de un hotel de lujo por 25$ no está nada mal.

Además de evitarnos las escaleras y subir en teleférico.

La próxima vez que vayamos no nos lo perdemos…

Así que si vais a Karma Beach mirad el tema de la oferta porque igual os interesa.

De nuevo subimos las interminables escaleras, cogimos la moto y reanudamos nuestro camino.

Comida Warung local

De camino al Templo Uluwatu paramos a comer en un warung local por 140mil rupias (9,80 Eur)

Suluban Beach

Parking 5000 Rupias (0,35 Eur)

Después de comer, y antes de ir al Templo Uluwatu, fuimos a la playa Suluban o Blue Point.

Esta playa es famosa por los surfistas que se congregan allí.

Realmente no te puedes bañar mucho pero es curioso acercarse para contemplar como hacen surf. Yo me quedaba embobada.

Hay que bajar una escaleras y entre rocas hasta llegar a la playa.

Esta zona esta llena de garitos y tiene mucho ambiente y buen rollito del que nos gusta a nosotros.

Nos tomamos algo rápido en SingleFin.

Habíamos leído que los domingos había fiestuqui muy chula. Qué pena que no coincidiera en domingo, pero seguro que volveremos a Uluwatu.

Lo malo fue que esta terraza que tanto vemos en las fotos de esta playa, estaba en obras y estaba realmente feo.

Después de impregnarnos de este ambiente surfero y molón, pusimos rumbo al Templo Uluwatu.

Templo Uluwatu

Pecatu, South Kuta, Badung Regency, Bali, Indonesia

30mil rupias (2,10 Eur)

Ubicado en un acantilado de más de 75 metros de altura y rodeado de ese paisaje, es uno de los templos más especiales  y mágicos de Bali.

La luz del atardecer le otorga un brillo especial al lugar.

Además de mágico y especial el templo Uluwatu es famoso por sus monos, ya que son salvajes y traviesos.

Estos monos son famosos por ladronzuelos y robar gafas, cámaras y demás cosas a los turistas.

Después del episodio con los monos por la mañana, yo iba realmente acojonada y esquivando todos los monos que veía.

Vimos a un mono robarle la zapatilla a una niña pequeña que lloraba desconsolada. Un trabajador le dio algo de comer al mono y le devolvió el zapato.

Estuvimos paseando por el templo y recorriendo todo sus rincones, alucinando con las vistas de los acantilados y el precioso meru del templo.

Realmente es un lugar especial y mágico.

Danza Keckak

100mil rupias (7 Eur)

Habíamos leído que al atardecer hacían una función de la danza Keckak o danza del fuego.

Como nos había gustado tanto la danza balinesa, compramos las entradas para ver la función, un poco caras en mi opinión.

Se representa en el anfiteatro con vistas al mar y al templo.

La función está bien y es muy curioso ver este tipo de danza pero se hace un poco larga.

Eso sí las vistas y el atardecer fue espectacular.

Nuestro último atardecer en Bali

Conductor en Bali

La mejor opción es que contratéis un conductor privado por días y organicéis las visitas como queráis, como hicimos nosotros.

Podéis contratar vuestro conductor privado en Bali y organizar con él las visitas de cada día.

Conductor privado en Bali

Cena The Mango Tree

200mil rupias (14 Eur)

Después de la función, cogimos la moto y pusimos rumbo al hotel.

Paramos a cenar en The Mango Tree unas hamburguesas por 200mil rupias (14 Eur)

Era nuestra última noche en Bali y recordamos todo lo que habíamos vivido estos días y cuanto nos había gustado esta isla.

Sin duda volveremos a Bali.

Os dejo con el video resumen de nuestros días en Bali.

Llegamos al hotel, nos duchamos y preparamos las mochilas.

Al día siguiente madrugábamos para ir al aeropuerto.

Nos esperaba la siguiente parte del viaje, Lombok. Y teníamos muchas ganas.

¿Os venís con nosotros a Lombok?